La digitalización del sector inmobiliario ha pasado, en cuestión de un año, de ser una opción a una necesidad. No cabe duda de que el principal factor de cambio ha sido el Covid-19, aunque también han propiciado un escenario perfecto para la transformación digital, la globalización del mercado y la rápida evolución de la tecnología.
La modernización tecnológica ofrece a las empresas inmobiliarias una serie de herramientas para que estas sean mucho más eficientes y productivas. No solo contribuyen a automatizar procesos y minimizar costos, sino que permiten generar mayores ganancias y aumentar el ROI. Sin olvidar, por supuesto, que contribuyen a una importante mejora en la prestación de servicios inmobiliarios y atención a clientes.
La implementación de innovaciones tecnológicas en el sector inmobiliario para incrementar las oportunidades de venta puede aplicarse tanto en la gestión comercial como en el desarrollo de una estrategia de marketing digital en los negocios de inmuebles. Estas son las herramientas básicas para lograrlo:
CRM inmobiliario
La principal herramienta de digitalización de una empresa inmobiliaria es el CRM. El CRM inmobiliario es un software que facilita la gestión de la relación con los clientes.
Se trata de un programa sencillo, pero imprescindible, para construir una base de datos nutrida, extraer información valiosa y tomar las decisiones más acertadas en el momento oportuno para satisfacer las necesidades tanto de los compradores como de los clientes.
Esta herramienta permite mantener registrados en un mismo lugar los datos de propietarios, compradores, inmuebles disponibles, clientes potenciales,… Además de facilitar la automatización de los procesos, la gestión de los datos y el control y seguimiento de acciones comerciales.
Chatbots
Tanto para comprar como para vender una casa, la gran mayoría de las personas recurrimos a Internet. Si bien es cierto, y las estadísticas nos dan la razón, por lo general somos bastante reacios a completar formularios. En cambio, mostramos una gran disposición a hacer consultas a un chatbot.
Estos robots, gracias a la inteligencia artificial, se han convertido en grandes aliados para los negocios inmobiliarios. Pueden estar disponibles 24/7 registrando información valiosa de los contactos y respondiendo a preguntas que le permitan evaluarlos y calificarlos como clientes potenciales para una posterior intervención del agente.
Visitas virtuales
Previo al estado de alarma y confinamiento de la población, la realidad virtual ya había alcanzado una gran aceptación en el proceso de digitalización del sector inmobiliario. Ahora, se ha hecho imprescindible ante la imposibilidad de realizar visitas a las viviendas.
A diferencia de las descripciones y fotografías de los tradicionales anuncios inmobiliarios, las visitas virtuales ofrecen una mejor representación del inmueble y garantizan una mejor experiencia del cliente.
Big Data
El Big Data es una disciplina que contribuye a transformar todos los datos, que genera el sector inmobiliario, y que no son pocos, en conocimiento para ayudar a los agentes a tomar decisiones estratégicas.
Tengamos presente que el Big Data no es sólo recopilación de datos para una inmobiliaria, es también el análisis de los mismos para obtener una visión del mercado como nunca antes se había logrado.
Y lo más importante, el Big Data permite segmentar el mercado objetivo y conocer los perfiles de clientes ideales con una gran exactitud. Facilitando que el asesor inmobiliario se adelante a la competencia y contacte con el cliente potencial con una oferta totalmente personalizada.
Firma digital
La firma digital ha facilitado y ha agilizado durante los últimos años cualquier trámite relacionado con el proceso de alquiler o compraventa de un inmueble.
Sin duda, se trata de otra gran herramienta para mejorar la experiencia de los clientes ahorrándoles tiempo en desplazamientos innecesarios o gestiones que pueden resolverse a distancia sin complicaciones.
Para ello, recomendamos el uso de programas específicos que permitan cerrar operaciones con seguridad para todas las partes intervinientes.
Iniciar la transformación digital en un negocio inmobiliario es cuestión de analizar las necesidades actuales del mismo y estudiar las herramientas adecuadas para cubrirlas.
Esta digitalización no tiene porqué requerir grandes cambios estructurales o una elevada inversión inicial. Opciones asequibles como poner en marcha un CRM inmobiliario, mejorar la experiencia del cliente y dedicar algo más de tiempo a organizar y analizar los datos pueden proporcionar grandes resultados a muy corto plazo. Garantizado.